(Mateo 5:27, 28; Salmo 119:9-15)
INTRODUCCIÓN: Tendemos a meditar que hay polución en el ámbito que nos circunda, pero no pensamos en la polución en el ámbito que nos circunda. corazón. No obstante, esto fue lo que Jesús vio: “Pues de dentro, del corazón de los hombres, van los pésimos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los asesinatos… Todas y cada una estas maldades de dentro van, y contaminan a la persona” (Mt. 7:21- 21) 23). Indudablemente, el mayor desafío para todo fiel es estar limpio. El fiel es como esa flor blanca que nace en las minas de carbón. Pese a todo cuanto le circunda, puede sostener su color y brillo. Se conoce que los pensamientos y los impulsos pertenecen a los inconvenientes mucho más graves con los que nos encaramos todos y cada uno de los días. Se dijo que el 90% de las compras se hacen por impulso. ¿Ha sentido con qué continuidad la gente devuelven un producto pues se dieron cuenta que no era lo que estaban intentando encontrar? Lo que hacemos está preciso con lo que pensamos; pero más que nada con lo que observamos. Conque no es verdad que lo que ves no te perjudica. Si ese fuera la situacion, ¿por qué razón la gente que creen en la televisión invierten millones de dólares estadounidenses en un comercial, solo por fracciones de segundo? ¿Por qué razón piensas que la pornografía pertence a los artículos mucho más buscados en Internet, películas, televisión y gacetas? Los expertos en este inconveniente nos cuentan desde la adicción desmandada hasta los efectos sicológicos y espirituales, con secuelas muy perjudiciales para todos los que la practican y quienes están muy cerca de ti. Jesucristo, el Profesor más especial, nos descubrió en entre los contenidos escritos mucho más espectaculares de las Escrituras, la guerra del corazón humano: “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo les digo que cualquier persona que mira a una mujer para cometer adulterio, ahora cometió adulterio con ella en su corazón.” El viejo conocimiento puso la prohibición instantaneamente mismo, pero Jesús la puso en los pensamientos; entonces todo empieza. El mayor tema que debe enfocar nuestra atención es de qué forma tenemos la posibilidad de combatir esta guerra del corazón, pienso que a todos nos interesará comprender, observemos ciertos pasos.
De qué manera proteger la cabeza – 3 maneras de eludir los pésimos pensamientos
Proteger los pensamientos puede separarnos del pecado pues antes de accionar en oposición a los principios de Dios, el pecado está en nuestra cabeza, de ahí que es esencial huír de todo cuanto logre perturbar nuestros pensamientos, y aquí tenemos la posibilidad de enseñarte ciertas recomendaciones realmente útiles:
Es demasiado esencial leer la palabra de Dios a fin de que la cabeza se ocupe en las cosas de todo el mundo, el Reino de los cielos y no en cosas terrenales y filosóficas .
¿De qué forma supervisar nuestros pensamientos y liberarnos de los pésimos pensamientos?
Hete aquí ciertas recomendaciones para supervisar nuestros pensamientos y liberarnos de los pésimos pensamientos: 1. Estar en la Palabra de Dios a fin de que tengamos la posibilidad admitir en el momento en que un pensamiento pecaminoso entra en nuestra cabeza (tentación). y entender qué curso tomar.
Para liberarte de los pensamientos negativos precisas evaluar otro enfoque, que te va a ayudar a aclarar tu cabeza al fin y al cabo.