Es requisito adecentar la chimenea para garantizar su buen estado y desempeño, esta limpieza integral se efectúa una vez por año, en el final de la temporada de empleo. Es esencial que no dejes sucio el conducto de evacuación de humos (de un año para otro). La meta primordial de la limpieza de la chimenea es remover este tubo y las paredes de todo el hollín que se adhiere a él con la utilización y el tiempo.
Además, en el momento en que la chimenea se utilice todos los días a lo largo del invierno, se aconseja efectuar una limpieza de cuidado semanal. Adecentar el hollín cada semana evitará que se muestre la creosota, una substancia enormemente inflamable que asimismo puede evitar el buen desempeño de la chimenea.
Limpieza de la chimenea de leña
Como ahora vimos, da lo mismo el género de chimenea que poseas en el hogar, de ladrillo, de mampostería o una estufa tradicional de acero, la leña es la producción. de múltiples desechos.
Limpieza química punto por punto
Esta segunda opción para deshollinar te resultará considerablemente más simple que la previo, en tanto que los modelos químicos la procesan por ti.
Cabe indicar que este es un desarrollo conveniente para un cuidado periódico, no para una limpieza integral. En consecuencia, no servirá para una limpieza intensamente, pero sí para la limpieza semanal de chimeneas.
Limpieza química
- Prender el fuego y aguardar 30 minutos hasta el momento en que el tubo esté ardiente. Esta es la higiene de cuidado a lo largo del empleo.
- Apaga las llamas con troncos de deshollinador. Si deseas, puedes incorporarlos sin sacarlos del envoltorio. Controla el tamaño del producto según la utilización de la chimenea. Si lo enciendes ocasionalmente, una bolsa semanal es bastante. Si lo ejecutas múltiples días seguidos, demanda 3 packs por semana.
- En el momento en que las cenizas se enfríen, sácalas. Con estos pasos tu chimenea va a estar en las mejores condiciones hasta el próximo baño.
Mucho más información: Calderas de condensación: desempeño, virtudes y desventajas
2 trucos para adecentar la chimenea
Para hacer más simple la limpieza semanal de cuidado de tu chimenea, compartimos 2 trucos caseros.
El primer truco que precisarás es remover las máculas bien difíciles de los ladrillos. Primero, sumerge el cepillo deshollinador en una mezcla de medio litro de agua y 2 medidas de cuchara de vinagre. Tras eso, frota los ladrillos a lo largo de unos minutos con el cepillo húmedo. Los puntos negros van a ser eliminados. Otra alternativa es utilizar bicarbonato de sodio. Crea una pasta con una cucharada de bicarbonato de sodio y una medida pequeña de agua. Extiéndelo sobre las máculas y déjalo accionar unos minutos. Concluye retirando la mezcla con el apoyo de un paño húmedo.