Es primordial tener una aceptable higiene y sostener las orejas de tu gato para impedir y eludir futuros inconvenientes. Las orejas forman parte integral del lenguaje corporal de los gatos, en tanto que, merced a sus 32 músculos, tenemos la posibilidad de comprender y admitir las distintas expresiones de nuestro felino.
¿Es esencial adecentar la oreja de mi gato?
Transporta a tu gato a un espacio relajado
Primeramente, en lo que se refiere a la continuidad, se aconseja comprobar los oídos si tu gato no posee ningún inconveniente, una vez por semana o una vez por semana. Si padece ciertos síntomas nombrados previamente, su veterinario le señalará la continuidad de atención.
Si no has utilizado a tu gato para limpiarle los oídos desde el instante en que era un bebé, posiblemente no pare inmediatamente o que le resulte incómodo. Por este motivo, te aconsejamos que el ambiente sea lo mucho más conveniente viable, con lo que jura limpiarlos en un espacio relajado de tu hogar. Y más que nada sin otras mascotas alrededor.
¿De qué manera sé si mi gato tiene inconvenientes de oído?
Si tu gato tiene dolores o afecciones por una otitis, por poner un ejemplo, puedes ver:
- El pañuelo sale mucho más sucio de lo común en el momento en que le limpias las orejas
- Tiene pus u otras secreciones
- Es de un color diferente al frecuente, por servirnos de un ejemplo cobrizo oscurísimo o aun negro
- Tiene exceso de orejas
- Tiene inclina la cabeza (4tixagb_14) )
- Se frota la cabeza y las orejas contra los muebles de casa
- Se rasca de mala gana.
ANTES DE LIMPIAR
Si tienes un gato sabes realmente bien que levantarlo y ponerlo encima para revisarle las orejas es como una misión irrealizable. Va a salir corriendo y no dejará que lo toques.
Para eludir esta situación, es preferible aguardar a que el gato te busque y te pregunte. Como puede ser en el momento en que desea mimos o en el momento en que tiene bastante sueño.
Examina sus orejas de cerca
El paso inicial es investigar las orejas de tu gato. Halla un instante del día en el que tu gato esté relajado.
Ahora, palpa sus oídos y verifica visualmente si hay exceso de cera, parásitos o pequeñas lesiones.